• Exhortamos a los párrocos y Hermandades que prioricen las celebraciones litúrgicas, dada la importancia de la Misa del Domingo de Ramos y el Triduo Santo.
• Pedimos que la organización de los cortejos procesionales en los templos no alteren los horarios ni el ritmo propio de las celebraciones litúrgicas más importantes del año cristiano.
• Recordamos que se deben observar las normas litúrgicas tal y como las recoge el Calendario Litúrgico de la Conferencia Episcopal Española y las rúbricas de los rituales.