El pasado sábado, 14 de septiembre, la Diócesis de Huelva vivió un momento histórico con la oficialización del inicio de la vida de la comunidad de las Obreras del Corazón de Jesús en la provincia.
Las Obreras del Corazón de Jesús fueron fundadas en la primera mitad del siglo XX por el Padre Pedro Castro y la Madre Mª Jesús Herruzo Martos, con el objetivo de evangelizar en los campos y pueblos pequeños, atendiendo a aquellos con menos recursos para conocer y amar a Dios. Tal y como se definen en su portal web, son mujeres que consagran “su vida al servicio de Cristo en la Iglesia llegando a las personas más pobres y abandonadas, donde no va el sacerdote ni otra religiosa. Una mujer desligada de todo amor humano y con un corazón encendido en el amor a Jesucristo, en cuyo Divino Corazón encuentran todo su consuelo, toda su vida, todo su bienestar, deseando con toda su alma revestir su propio corazón de los sentimientos de que está revestido el Corazón de su esposo Jesucristo. (P.Fundador).”
Durante la Eucaristía, en la que participaron un gran número de fieles, además del coro y los grupos parroquiales, se destacó el carisma de la fundación en la monición de entrada.
El obispo agradeció a las Obreras del Corazón de Jesús por elegir Huelva para continuar su misión. Además, asistieron a la ceremonia el Vicario episcopal para la Administración de los Bienes Diocesanos y Relaciones Institucionales, Jaime J. Cano Gamero, el vicario parroquial de la parroquia de Ntra. Sra. del Reposo de Valverde del Camino, Rafal Leszek Januszewki y el párroco de Santa Olalla del Cala, Piotr Boguta.
La comunidad recién establecida, con su superiora general, M. María Teresa Núñez Villanueva, será un importante apoyo pastoral para la diócesis, dedicándose a expandir el mensaje de amor y evangelización en la zona rural de Santa Olalla del Cala y sus alrededores.