«Dadles vosotros de comer»
Este domingo toda la Iglesia celebra la festividad del Corpus Cristi. Fiesta en la que recordamos que Cristo está con nosotros, la muerte no le ganó, se quedó con nosotros en el pan de la Eucaristía. Pan que nos devuelve la vida con mayúsculas, Pan que nos hace ser lo que estamos llamados a ser, Pan que nos cura las heridas, Pan que nos salva…
La invitación de Jesús para todos es clara, “dadles vosotros de comer”. Él vivió su vida dando vida a todo el que lo necesitaba, sin mirar procedencia, sexo o raza y nos llama a todos ha hacer lo mismo.
Este dadle vosotros de comer, es la misión de toda la comunidad cristiana. Desde Caritas se nos plantea este año el lema “Mientras haya personas hay esperanza”, se quiere resaltar la esperanza que habita en cada ser humano, porque somos criaturas de Dios. La esperanza es una gracia que recibimos y que toma forma de semillas de fraternidad y de solidaridad en cada persona, que brotan en forma de pequeños gestos cotidianos.
A veces, como los apóstoles tenemos la tentación de la comodidad y la despreocupación “Despide a la gente; que vayan a las aldeas y cortijos de alrededor a buscar alojamiento y comida, porque aquí estamos en descampado”. Otras veces pensamos que nosotros no podemos, no tenemos suficiente, no sabemos… “No tenemos más que cinco panes y dos peces”. Sin embargo, si miramos de frente a Jesús, lo encontraremos mirándonos e invitándonos a dar de lo nuestro, de lo que tenemos, a acoger sin miedo, a servir sin medida, a abrirnos al que nos necesita, esa es nuestra misión: dar de comer al hambriento, dar de beber al sediento, visitar al enfermo, acoger al extranjero, liberar al preso. Y cada vez que lo hagamos en su nombre, ese Pan de la Eucaristía seguirá estando vivo para el mundo, cada vez que lo hagamos estaremos llevando la Buena Noticia , cada vez que lo hagamos esteremos celebrando el Corpus Cristi.
Feliz festividad del Corpus, que este año renovemos la alegría de servir y darnos a los otros como Jesús lo hizo, dando su vida hasta el final, con los ojos puestos en el Padre que nos ama y nos necesita para la construcción del Reino.
María N. Macías
Directora de Caritas Diocesana de Huelva