En su segundo curso por Huelva, Proyecto Amor Conyugal sigue recorriendo caminos y haciendo paradas para dejar la paz del Espíritu Santo en los pueblos donde lo acogen y en los matrimonios que le dan entrada en su intimidad matrimonial.
Ya son siete las parroquias de la diócesis donde este proyecto de la Virgen María, apoyado por sus párrocos, va echando raíces para ofrecer un lugar de sosiego y paz en esta ajetreada vida a los esposos que, en muchas ocasiones, viven juntos pero no en armonía.
Esa semilla que empieza a enraizar en Almonte, Bollullos, Chucena, Hinojos, Huelva, La Palma del Condado y por último en Moguer sigue expandiéndose de la mano de unos comprometidos matrimonios que no cesan en su empeño y que continuarán este verano con adoraciones para matrimonios en Matalascañas y La Antilla.
Y seguirán haciéndolo allá dónde unos corazones abiertos y dónde un párroco ofrezca una tierra para sembrar el Proyecto Amor Conyugal.
Delegación Diocesana de la Familia y Vida