La capilla del Seminario Diocesano de la Inmaculada Concepción acogió en la tarde de este martes, 19 de diciembre, un Laudato Vocacional (Hora Santa de Adoración al Santísimo Sacramento) para pedir a Dios por las vocaciones a los distintos estados de vida cristiana, enfocándose en la búsqueda y el discernimiento de aquellos llamados a servir a la Iglesia en las diversas vocaciones.
A esta convocatoria abierta acudió un nutrido grupo de jóvenes que, de forma activa, participan del Secretariado de Pastoral de Juventud y Adolescencia y de la Delegación Diocesana de Pastoral Universitaria, junto a la Comunidad del Seminario Diocesano.
Durante la exposición de su Divina Majestad, el delegado de Pastoral Vocacional, D. Freddy Enrique Uzcátegui Rodríguez, dirigió una serie de meditaciones en las que se puso de manifiesto la necesidad del nacimiento de nuevas vocaciones al sacerdocio, la vida consagrada, el matrimonio o la vocación a la vida laical, dirigiendo a Dios la súplica de conceder también de valentía a todos los que dudan en dar respuesta a esta llamada.
Desde la Pastoral Vocacional de nuestra diócesis se destaca la importancia de la “oración continua por las vocaciones”, subrayando que la Iglesia “necesita corazones dispuestos a responder al llamado divino, comprometidos con el servicio y la entrega al Pueblo de Dios”.