Se trata de una iniciativa organizada por la Asociación del Belén viviente, que cuenta con varias organizaciones de Mazagón, entre ellas, la parroquia, a través de la que participan personas de todos los grupos parroquiales.
El Belén está dividido en varios espacios en los que es posible encontrar alimentos típicos, como buñuelos o vino de la tierra. El Belén, en el que participan personas de todas las edades y que cuenta con animales vivos, se puede recorrer cómodamente a pie, pudiéndose acceder también con carritos de paseo y sillas de ruedas. La entrada es gratuita.