Inspirado por las palabras del Papa Francisco en su carta Spes non confundit, el prelado invita a todos los fieles a vivir un encuentro profundo y personal con Cristo, “puerta de salvación”.
Lugares Sagrados y Peregrinaciones
Los fieles podrán obtener indulgencias mediante peregrinaciones y visitas devotas a los siguientes lugares sagrados designados:
- Santa Iglesia Catedral de Nuestra Señora de la Merced en Huelva, corazón litúrgico de la diócesis.
- Santuarios marianos de cada vicaría:
- Santuario Diocesano de María Santísima de la Peña (Puebla de Guzmán, Vicaría de la Costa y Andévalo).
- Santuario Nacional de Nuestra Señora del Rocío (Almonte, Vicaría del Condado).
- Santuario Diocesano de Nuestra Señora de la Cinta (Huelva ciudad).
- Santuario Diocesano de la Reina de los Ángeles (Alájar, Vicaría de la Sierra y Minas).
Los fieles podrán participar en celebraciones jubilares, realizar adoración eucarística, meditar, y concluir con el rezo del Padre Nuestro, la Profesión de Fe y una invocación a la Virgen María.
Obras de Misericordia y Penitencia
Además de las peregrinaciones, se podrá lucrar indulgencias mediante:
- Participación en misiones populares, ejercicios espirituales o encuentros formativos.
- Realización de obras de misericordia, como visitar enfermos, ancianos, o personas necesitadas, y cumplir actos penitenciales, como abstenerse de consumos superfluos los viernes y donar a los pobres.
Indulgencias para Enfermos e Impedidos
Los fieles que no puedan desplazarse podrán unirse espiritualmente mediante la oración en sus hogares y la ofrenda de sus sufrimientos, especialmente durante las transmisiones de los actos jubilares.
Condiciones para obtener las Indulgencias
Se requiere confesión sacramental, comunión eucarística, y oración por las intenciones del Papa. Las indulgencias podrán aplicarse tanto para uno mismo como en sufragio por las almas del purgatorio.
Facultades Especiales para Confesores
Durante el Año Jubilar, los sacerdotes que confiesen en los lugares designados gozarán de facultades especiales para absolver ciertas censuras graves, buscando siempre la reconciliación plena de los fieles.
El Obispo concluye su decreto deseando que este Año Jubilar sea una oportunidad de renovación espiritual para todos los fieles de Huelva, bajo el amparo de la Santísima Virgen María.