La lápida funeraria del obispo Vincómalos es una pieza arqueológica que nos habla del cristianismo primitivo de la provincia de Huelva y de su pasado visigótico. La pieza apareció junto con otras inscripciones lapidarias cristianas en el año 1992 en la finca “los Bogeos” del término municipal de Bonares, a unos kilómetros de Niebla.
Dicha lápida, realizada en mármol amarillento, destacó tras su hallazgo por la importancia que guarda su inscripción, en la que podemos leer: “VINCOMALOS EP[piscopu]S CHR[ist]I SERV-VS VIXIT AN-NOS LXXXV EX QVI-B[us] IN SACERDOTI-O VIXIT AN[nos] XLIII RECESSIT IN PACE D[ie] IIII NONAS FE-BRVARIAS ERA DXLVII”, que traducido del latín significa: “Vincomalos, obispo, siervo de Cristo, vivió 85 años, de los que vivió en el sacerdocio 43. Descansó en paz el día 4 de las nonas de febrero del año 547 de la era” (año 509 de la era cristiana).
Se trató por tanto de un hallazgo de gran importancia para la provincia puesto que su aparición supuso conocer al obispo más antiguo de la diócesis y el único del sigo V en la Bética. Hasta la aparición de la pieza, el obispo más antiguo que se conocía en la provincia era Basilio (c.589-590) constando su firma en la lista de las Actas del III Concilio de Toledo y del Sínodo de la Bética en el año 590.
No se conocen datos de este personaje más allá del presente vestigio arqueológico, del que se deduce que Vincómalos, que etimológicamente significa “vence a los malos”, fue un obispo anciano que fallece a los 85 años y que es nombrado sacerdote en el año 466.
Tras diversas investigaciones realizadas sobre este personaje a raíz de tan importante descubrimiento arqueológico, hoy sabemos que el obispo Vincómalos fue el primer obispo conocido de la provincia de Huelva, y que por la proximidad del hallazgo con Niebla podría tratarse del obispo de Ilipla, es por ello que la aparición de esta pieza documenta la existencia de esta diócesis a mediados del siglo V.
Otras lápidas funerarias halladas en la provincia de Huelva son la de Domigratia en Almonte en el año 495 y la de Basilia en Hinojales en el año 510, ambas fechadas posteriormente, con lo que el nombre de Vincómalos es además el nombre cristiano conocido más antiguo de la provincia.
Se conoce que en el lugar donde apareció la lápida se han encontrado vestigios arquitectónicos de gran relevancia entre los que destacan restos de una villa romana, una basílica, algunas casas y un cementerio. El descubrimiento de dicha pieza en este contexto no solo nos habla de la existencia de un núcleo urbano consolidado en la zona en el siglo V de nuestra era, sino también de la importancia del cristianismo en la región al contar con la figura principal de un obispo.
Su hallazgo permitió poner un nuevo punto de partida en las investigaciones sobre el pasado cristiano en la época visigótica en la provincia y dar nombre propio al primer obispo de la Diócesis. En la actualidad dicha pieza puede contemplarse en la sección de arqueología del Museo Provincial de Huelva.
Dolores Amores Cruz, historiadora del Arte