La capilla del Seminario Diocesano de Huelva acogió ayer sábado la Vigilia de Pentecostés organizada por la Delegación Diocesana para el Apostolado de los Laicos, en las vísperas del Día del Apostolado Seglar, que se celebra este domingo, 5 de junio, Solemnidad de Pentecostés.
La celebración fue presidida por el vicario general de la Diócesis de Huelva, P. Emilio Rodríguez, quien en su homilía, ha subrayado que “la fiesta de Pentecostés es el gozo de toda la Iglesia. Su constitución, sus cimientos, su vida. ¿Quién, sino el Espíritu, dinamiza, orienta, acota y alimenta todo lo que ocurre en el interior de nuestra comunidad?”.
Además, ha recordado que “no estamos solos”, porque “el Espíritu Santo viene sobre nosotros desde distintas direcciones, pero con un único objetivo: alentarnos hacia Dios”. Y para ello, “tendremos que levantar las antenas de las entrañas -la oración- para acoger la voluntad del Espíritu; las antenas del compromiso -la caridad- para no desentendernos del mundo; las antenas del asombro -la contemplación- para gozar de tantas cosas que Dios nos regala; las antenas de la gratitud -la Eucaristía- para sentirnos arropados por el manjar que es memorial de la mayor pasión, muerte y resurrección ocurrida en la historia, por manos de Dios, en el cuerpo de Cristo”.
Asimismo, el vicario general ha señalado que “la voz del Espíritu es ese gran regalo que Dios nos ofrece”. Y ha añadido: “¿Lo sentimos así? ¿Es el Espíritu Santo una fuente de vida en nuestra fe? ¿No os parece que sigue siendo un gran desconocido cuando resulta ser el gran operante en todas nuestras acciones pastorales?”.
“Hoy finaliza la Pascua, pero ahora nos toca a nosotros dar los pasos necesarios para que el Reino que anunció Jesús siga siendo algo vivo y dinámico en medio de nuestra sociedad”, ha dicho el P. Emilio Rodríguez, que ha recordado también que “es nuestra hora, el momento de dar razón de nuestra esperanza, de nuestra fe y de nuestra alegría con nuestra entrega persuasiva, entusiasta y permanentemente iluminada por la fuerza del Espíritu”.