El próximo sábado, 18 de noviembre, serán beatificados en la Catedral de Sevilla los mártires que forman el grupo de Manuel González-Serna Rodríguez y 19 compañeros mártires. De ellos, a siete, podemos considerarlos como mártires de nuestra tierra, bien porque nacieron en la provincia de Huelva, bien porque trabajaron pastoralmente en la misma.
MARIANO CABALLERO RUBIO, PBRO.
El caso más llamativo es el del Venerable Mariano Caballero Rubio, nacido en Alájar en 1895. Entró en el Seminario de Sevilla con 23 años, siendo ordenado presbítero en dicha ciudad el 22 de diciembre de 1923. Sus primeros destinos pastorales los tuvo en Lepe (1923); El Villar (1923-1924); en Aracena y Carboneras, concretamente como capellán de las Madres Dominicas y como párroco de la de San Antonio Abad de Carboneras (1924-1928). De allí pasó como párroco a Linares de la Sierra (1928-1930). Posteriormente, ya en Huelva, fue nombrado coadjutor de la Parroquia de la Purísima Concepción y capellán de las Hermanas del Santo Ángel. En 1934 pasó como coadjutor a la Parroquia Mayor de San Pedro, cargo durante el cual le llegó el martirio.
Ante la persecución religiosa, el 22 de julio de 1936, intentó refugiarse en Punta Umbría, donde al llegar fue detenido por su condición sacerdotal. Desde allí fue devuelto a Huelva en la canoa “Dolores”. Al llegar a la capital, a pesar de haber sido protegido por la Guardia Civil y por el presidente de la Diputación, que pidió un coche para su traslado junto a otro sacerdote, en el muelle fue martirizado. De allí le llevaron a la Casa de Socorro y al Hospital de la Merced, donde entregó su alma a Dios resignado en sus manos, el día 23 de julio a la edad de cuarenta años. Su cuerpo fue exhumado en el Cementerio de Huelva el pasado 4 de noviembre y llevado a la Parroquia Mayor de San Pedro, donde a partir de su beatificación serán venerados sus restos.
MIGUEL BORRERO PICÓN, PBRO.
Era natural de Beas, donde nació en 1873. Con 17 años ingresó en el Seminario de Sevilla, donde fue ordenado presbítero el 13 de septiembre de 1903. Su primer destino pastoral lo tuvo como coadjutor de Cortegana (1904-1905), pasando después como párroco a Castaño del Robledo (1905-1909) y al Villar (1909) como encargado de aquella Parroquia, así como a Lepe (1910) como ecónomo y a su pueblo natal de Beas (1910-1911) como regente. Entre 1911 y 1915 estuvo en Moguer como capellán de las HH. Esclavas del Divino Corazón de Moguer, cuando fue nombrado ecónomo de Rosal de la Frontera (1915-1919), en ese último año opositó y obtuvo en propiedad la Parroquia de Santa Olalla del Cala, donde estuvo hasta 1923 en que fue nombrado coadjutor de Santa María de la Mesa, de Utrera (Sevilla), cargo que ejerció hasta su muerte, tras su detención por su condición sacerdotal el 19 de julio de 1936. Fue martirizado el 26 de julio, cuando contaba 62 años de edad.
ANTONIO JESÚS DÍAZ RAMOS, PBRO.
Nacido en Bollullos Par del Condado en 1896, hijo del organista de la Parroquia de Santiago. En 1909 ingresó en el Seminario de Sevilla, donde fue ordenado presbítero el 19 de diciembre de 1920. Todo su ministerio sacerdotal lo realizó en Cazalla de la Sierra, Parroquia de la que fue nombrado coadjutor el 10 de marzo de 1921, cargo que ejerció hasta su nombramiento como ecónomo en 1931. Allí desarrolló su misión con verdadero celo apostólico. Por su condición sacerdotal fue detenido el 18 de julio de 1936 y martirizado el 5 de Agosto a los 39 años de edad.
MANUEL GONZÁLEZ-SERNA RODRÍGUEZ, PBRO.
Nacido en Sevilla en 1880. Ingresó en el Seminario hispalense en 1894, siendo ordenado presbítero el 20 de septiembre de 1902,de manos del beato Marcelo Spínola y Maestre. Primero fue capellán de las Esclavas en Sevilla. En 1905 fue destinado como regente de la Parroquia Mayor de San Pedro, de Huelva, junto al arcipreste San Manuel González, de quien fue un gran colaborador, como en el caso de la creación de las Escuelas del Sagrado Corazón. En 1909 fue destinado a Trigueros, como rector de la misma, donde estuvo hasta 1911, en que opositó y obtuvo el curato de Constantina (Sevilla), donde desarrolló una labor apostólica importante. Fue martirizado en la propia iglesia parroquial de Constantina, después de haber sido vejado y maltratado, el 23 de julio de 1936, a los 56 años de edad.
PEDRO CARBALLO CORRALES, PBRO.
Natural de Ubrique (Cádiz), nació en 1886. Ordenado presbítero el 18 de diciembre de 1910 en Sevilla. Su primer destino pastoral lo tuvo en Huelva, como capellán de la Beneficencia municipal (1911-1918). Posteriormente tuvo varios destinos: coadjutor de San Eutropio de Sanlúcar la Mayor (Sevilla), regente de Alcolea del Río (Sevilla) y, por último cura de Guadalcanal (Sevilla) en 1919, donde permaneció hasta su Muerte martirial el 6 de Agosto de 1936, a los 49 años.
MANUEL PALACIOS RODRÍGUEZ, FIEL CRISTIANO LAICO
Nació en Aracena en 1887. Siendo ya vecino de Cazalla de la Sierra (Sevilla), casó allí. Se dedicaba al laboreo de las tierras familiares y al cultivo de viñas. Fue un hombre comprometido con la Iglesia, ya fuera desde su participación en política o como miembro destacado de la comunidad parroquial de Cazalla. Fue martirizado in odium fidei el 5 de Agosto de 1936, con 59 años de edad, junto a su hijo, el seminarista Enrique Palacios Monrabá. Previamente había encargado a su viuda que no denunciara ni tomara represalias contra sus asesinos.
CRISTÓBAL PÉREZ PASCUAL, FIEL CRISTIANO LAICO
Nació en Alájar en 1887. Miembro destacado de la comunidad parroquial de Cazalla de la Sierra, donde ejercía su profesión de farmacéutico, dotado de una gran caridad para con los pobres. Fue martirizado in odium fidei el 5 de Agosto de 1936 a los 48 años de edad.
Estos datos han sido extraídos de la obra de José Leonardo Ruiz Sánchez: “Mártires de la persecución religiosa en la archidiócesis de Sevilla (1936)”. Ed. Arzobispado de Sevilla y Real Maestranza de Caballería. Sevilla, 2021