Este miércoles, 26 de marzo, varias decenas de personas se congregaron frente a la Iglesia de la Concepción en Huelva para participar en el Círculo de Silencio, una iniciativa mensual organizada por el Secretariado Diocesano de Migraciones. En esta ocasión, el encuentro se centró en visibilizar la realidad de las empleadas del hogar migrantes, bajo el lema «Empleadas del Hogar Migrantes».
La realidad de las empleadas del hogar migrantes
Durante el acto, se destacó la situación de vulnerabilidad que enfrentan muchas mujeres migrantes empleadas en el sector doméstico. Se hizo hincapié en la necesidad de reconocer y valorar su labor, así como de garantizar sus derechos laborales y humanos. Los participantes reflexionaron en silencio sobre las dificultades que estas trabajadoras enfrentan diariamente, desde la precariedad laboral hasta la falta de reconocimiento social.
Participación activa de la comunidad
La convocatoria contó con la participación de diversas entidades sociales de la diócesis, así como de ciudadanos comprometidos con la causa migrante. La presencia de varias decenas de personas evidenció la solidaridad de la comunidad onubense y su compromiso con la justicia social. Los asistentes formaron un círculo y mantuvieron un tiempo de silencio, simbolizando la unión y el apoyo a las empleadas del hogar migrantes.
Continuidad de la iniciativa
El Secretariado Diocesano de Migraciones recordó que el Círculo de Silencio se realiza el último miércoles de cada mes, invitando a toda la ciudadanía a sumarse a este espacio de reflexión y denuncia pacífica. La próxima convocatoria tendrá lugar el 30 de abril, nuevamente frente a la Iglesia de la Concepción, de 19:00 a 19:30 horas. Se espera continuar visibilizando las diversas problemáticas que afectan a las personas migrantes y promover una sociedad más inclusiva y respetuosa con los derechos humanos.


